Desde que empezó este tiempo “pandémico”, mi vida como la de  todos ustedes, ha pasado por una montaña rusa de emociones, hemos brincado del humor al odio, del estrés a la paz y de la certidumbre a la nada … si algo es cierto al día de hoy es que el mañana no es seguro en ningún sentido, de un día a otro la libertad se nos acabó como la conocíamos y las cosas ahora viven en una “nueva normalidad” a la que cada día nos adaptamos, tirando una moneda al aire, porque no sabemos si al día siguiente va a surgir otra cosa en este mundo sobre la cual tampoco tendremos ningún control.

Pero ante todo este caos de situaciones inesperadas y noticias sin parar, hay cosas que han mejorado enormemente, como los negocios en internet, todo lo que se refiere a venta en línea, educación, entretenimiento, al no tener la opción de salir libremente, nuestra vida es a través de la web y es ahí donde están las mayores oportunidades de crecimiento.

El problema es que la oferta esta saturada, cuando navegas buscando algo, te encuentras con miles de proveedores, opciones nuevas, usadas, semi-usadas, importadas y es un tanto abrumador. Pero siendo sinceros … ¿cuál es la opción que siempre eliges?  No siempre es la más barata, eso seguro, la elección la hacemos en base a que tanto se une el imaginario que tenemos en la cabeza de lo que estamos buscando a la realidad de lo que encontramos, y esto es lo que en merkadotecnia digital se llama valor, puede ser valor en el contenido o valor en cuanto a un producto, dependiendo del nivel en el que la información contribuye a solucionar la necesidad del usuario, es el nivel de atención que se recibe, y al construir una relación de confianza y de continuo valor, las ventas se vuelven sencillas.

Ahora, la forma correcta de entregar ese valor al consumidor es a través de hacer dos cosas:

1. Conocer la necesidad el consumidor
2. Identificar quién es ese consumidor (características demográficas y de comportamiento)

Por ejemplo: si buscas quitar una mancha de vino tinto de  tu camisa preferida, el detergente que te otorga mayor valor es aquel que realmente quita la mancha aunque igual no sea el más barato, y si buscas videos de cómo quitar manchas, el video que mejor te explique cómo hacerlo y realmente te haga que la mancha desaparezca es el que mayor valor te ofrece, ya se … estarás pensando … eso es OBVIO ¡!!! Pero en términos digitales no es tan obvio, ya que todo depende de la forma en la que comuniques el mensaje y cómo lo pongas a los ojos de las personas que lo pueden estar buscando.  Recuerda, la web es un mundo saturado y con muchísima competencia, todos quieren la atención del usuario, así que aunque tengas el mejor remedio (que por cierto para quitar manchas de vino tinto intenta primero siempre con vino blanco )  si no expones tu información a los ojos de tu posible consumidor o si no utilizas las palabras correctas para que Google pueda clasificar tu información, muy probablemente aunque seas un hit! nadie te va a encontrar.

Una vez que sepas cual es la necesidad de tu consumidor y quién sería (en este caso serían  hombres y mujeres mayores de 30 años que les guste el vino), debes crear la comunicación que vas a utilizar, ya sea un video o una página ofreciendo tu producto quita manchas, y definir las palabras clave que utilizarás para que Google pueda considerarte en el catálogo de “quita manchas de vino”. Las palabras clave, son las que utilizas cada vez que buscas algo en Google. El objetivo es hacer un listado de esas palabras y utilizarlas dentro de la información que compartas para que cuando tu consumidor busque en Google desesperado como limpiar su camisa manchada de vino,  te encuentre como primera opción (o sino al menos dentro de las 10 primeras).

Al otorgar valor a tu consumidor, se genera una conexión emocional muy diferente a la relación que se genera cuando únicamente le vendes algo, al recibir valor se genera lealtad y eso es … simplemente ¡invaluable!.

¡Hasta la próxima!

Fabiola